La Alimentación en la Oficina
Por. Lic. Nut. Guadalupe Herrera Estrada
En algunos países se vive con cierta naturalidad la desaparición formal de los horarios de comidas, a la par que se extiende el llamado fenómeno SAD (“Stuck At Desk”, pegado a la mesa) lo cual equivale a no salir del entorno laboral y comer en las mesas de trabajo.
Sin embargo, continua siendo una buena costumbre, llevar un desayuno o comida preparada desde casa, más aún si los alimentos que se ofrecen en el trabajo son inadecuados y aun mayor precio, esto claro que, requiere de organización, tiempo y esfuerzo previo, pero a la larga se obtendrás una alimentación más saludable, mejoraras el rendimiento en el trabajo, se fortalece tu sistema inmunológico y se ahorrarás dinero, pues la comida preparada en casa resulta más barata.
Si cuentas en el trabajo con un microondas, puedes llevar tus alimentos desde tu casa, es necesario que pienses en alimentos y preparaciones fáciles de transportar y calentar.
Si tu alternativa es comer en puestos ambulantes, en la medida que sea posible busca el lugar más limpio y seguro, elige carnes como son bistec, pollo, cocinados en salsas, caldos o caldillos. Evita tacos, quesadillas y gorditas fritas.
Si cuentas con un comedor o con un restaurante de comida corrida cercano, en ambos casos tienes la oportunidad elegir un menú más variado, prefiere:
Comer sanamente fuera de casa es posible, pues todo depende de las elecciones y porciones cotidianas de los alimentos, pues no existen buenos o malos alimentos, simplemente existen alimentos diferentes en nutrimentos y contenido calórico, por ello la clave es elegir con mesura todos los alimentos.
Comparte tus comidas con amigos, compañeros o familiares, algunos estudios demuestran que cuando las personas se sienten acompañadas comen menos, además tienen la oportunidad de compartir, en caso de que las raciones sean grandes.
Recuerda siempre consumir frutas y verduras frescas, cereales integrales sin azúcar, leguminosas con moderación, prefiere cortes magros en carnes, pollo y pescado; en menor proporción consume aceites, semillas y aguacate. No olvides practicar actividad física cotidianamente, pues esta última además de ayudarte a mantener un peso saludable, también te relajará y aumentará tu energía diaria.
Lic. Nut. Guadalupe Herrera Estrada, Nutriologa Certificada
Consultorio: Hegel 153-12 Col. Polanco Tel. 52544342/ 52544372
Cel. 0445514915616
Sin embargo, continua siendo una buena costumbre, llevar un desayuno o comida preparada desde casa, más aún si los alimentos que se ofrecen en el trabajo son inadecuados y aun mayor precio, esto claro que, requiere de organización, tiempo y esfuerzo previo, pero a la larga se obtendrás una alimentación más saludable, mejoraras el rendimiento en el trabajo, se fortalece tu sistema inmunológico y se ahorrarás dinero, pues la comida preparada en casa resulta más barata.
Si cuentas en el trabajo con un microondas, puedes llevar tus alimentos desde tu casa, es necesario que pienses en alimentos y preparaciones fáciles de transportar y calentar.
Si tu alternativa es comer en puestos ambulantes, en la medida que sea posible busca el lugar más limpio y seguro, elige carnes como son bistec, pollo, cocinados en salsas, caldos o caldillos. Evita tacos, quesadillas y gorditas fritas.
Si cuentas con un comedor o con un restaurante de comida corrida cercano, en ambos casos tienes la oportunidad elegir un menú más variado, prefiere:
- Caldo de pollo, sopa de verdura, sopa de pasta en caldillo
- En cuanto al platillo principal, elige con moderación asados, al vapor, a la plancha, estofados, caldos y caldillos. Evita todo lo frito, capeados, empanizados, gratinado y lo que se elabora a base de cremas.
- Si cuentas con barra de ensalada no dudes en servirte, pero evita todos los aderezos cremosos, mayonesas, cremas; prefiere limón y vinagretas en poca cantidad. Si las verduras que te ofrecen no están lavadas o desinfectadas prefiere las que estén cocidas o dentro del platillo principal
- En el momento de elegir tu bebida, evita agua preparada con jarabe o polvos, pide agua natural o mineral embotelladas y algunos días puedes elegir agua de frutas con poca azúcar
- Evita comer postre, esporádicamente puedes elegir alguna bola de nieve o gelatina de agua. Puedes finalizar tu comida consumiendo una fruta totalmente natural, son más ricas las de temporada.
- En reuniones de negocios o simplemente por placer, recuerda elegir alimentos bajos en calorías, evita lo frito, capeado o empanizado, gratinado, elige abundantes verduras frescas o cocidas. En el caso de las carnes, pollo y pescado prefiere cortes magros; evita postres, refrescos y bebidas alcohólicas.
Comer sanamente fuera de casa es posible, pues todo depende de las elecciones y porciones cotidianas de los alimentos, pues no existen buenos o malos alimentos, simplemente existen alimentos diferentes en nutrimentos y contenido calórico, por ello la clave es elegir con mesura todos los alimentos.
Comparte tus comidas con amigos, compañeros o familiares, algunos estudios demuestran que cuando las personas se sienten acompañadas comen menos, además tienen la oportunidad de compartir, en caso de que las raciones sean grandes.
Recuerda siempre consumir frutas y verduras frescas, cereales integrales sin azúcar, leguminosas con moderación, prefiere cortes magros en carnes, pollo y pescado; en menor proporción consume aceites, semillas y aguacate. No olvides practicar actividad física cotidianamente, pues esta última además de ayudarte a mantener un peso saludable, también te relajará y aumentará tu energía diaria.
Lic. Nut. Guadalupe Herrera Estrada, Nutriologa Certificada
Consultorio: Hegel 153-12 Col. Polanco Tel. 52544342/ 52544372
Cel. 0445514915616