Acné Vulgar

 

El acné se presenta con tanta frecuencia en adolescentes que incluso en alguna época fue considerado equívocamente como una parte fisiológica o normal del desarrollo. Actualmente es considerado una enfermedad de la piel de causa multifactorial, estando implicada la producción de lípidos por las glándulas sebáceas, la población bacteriana de la piel y la inflamación local.

¿Qué es?
Se trata de una enfermedad auto-limitada que involucra a los folículos sebáceos. La mayoría de los casos presentan una variedad de lesiones como son comedones, pápulas, pústulas, nódulos y que pueden dejar secuelas con cicatrización. Es un proceso dermatológico que afecta la unidad pilosebácea.

Nombres alternos
Popularmente se le suele llamar “Barros y Espinillas” o “Granos”.

¿Qué características tienen  las lesiones? ¿Cómo las identifico?
Las lesiones pueden presentarse con o sin inflamación. Las lesiones no inflamatorias (comedones) pueden presentarse abiertas (con cabeza negra) o cerradas (con cabeza blanca). La piel se nota elevada y estirada en las lesiones. Los comedones cerrados preceden frecuentemente a las lesiones inflamatorias de mayor tamaño.

Las lesiones inflamatorias pueden variar desde pequeñas pápulas con inflamación en su periferia, hasta pústulas (llenas de pus) que pueden presentarse grandes y sensibles o incluso a modo de nódulos.

Los nódulos grandes conforman las formas severas de acné noduloquístico.

El tamaño y extensión de la lesión a modo de pápula, pústula o nódulo dependerá de su localización e infiltración en la dermis.

¿Qué la causa?
Para entender el acné es necesario entender el funcionamiento normal de la glándula sebácea. Éstas glándulas se encuentran en la piel, encargadas de producir lípidos (grasa) que exudan hacia la superficie de la piel por medio de un ducto sebáceo. Algunos lípidos son reciclados antes de llegar a la superficie, de tal modo que solo los lípidos neutrales pueden alcanzar la superficie. La actividad de las glándulas sebáceas es muy alta al nacimiento, luego declina hasta un mínimo entre los 2 y los 6 años de edad, alrededor de los 7 años de edad, la secreción de las glándulas sebáceas empieza a aumentar hasta la adolescencia, volviendo a declinar lentamente a partir de los 20 años de edad. Esta secreción sebácea responde a la estimulación hormonal, proteínas y vitaminas de la dieta, así como predisposición genética.

Hasta el momento, no se ha encontrado una causa determinada para el acné, sin embargo, existe bastante información acerca de los factores que participan en su desarrollo. Es por ello que se considera una enfermedad multifactorial, que incluye:

El acné resulta tan común, que en algunos momentos ha llegado a considerarse como fisiológico o normal. Actualmente, es considerada una de las enfermedades dermatológicas más comunes. Algunos grados leves pueden presentarse en recién nacidos debido a la estimulación de las hormonas secretadas por las glándulas suprarrenales (andrógenos).

Frecuentemente es identificado como un indicador de manifestación temprana de la pubertad, pudiendo preceder a la primera menstruación (llamada menarquía , véase la sección de Ginecología) hasta por un año en mujeres. Los casos que suelen permanecer después de la adolescencia suelen encontrarse más en el sexo femenino, incluso hasta después de la tercera década de vida, aunque son casos menos comunes. El tipo de lesiones también puede resultar variable, encontrando comedones en los pacientes muy jóvenes, nóduloquistes en hombres blancos. Algunos síndromes genéticos pueden presentar casos más severos de acné.

¿Qué síntomas o molestias genera?
Las lesiones del acné pueden presentarse calientes, dolorosas al tacto y sensibles, variando en razón a su tamaño, tiempo de evolución y localización.

Es importante señalar que al presentarse mayormente en la etapa de la adolescencia, etapa durante la cual se está formando la personalidad del paciente, definiendo afinidades y gustos, puede interferir severamente con la formación psíquica del mismo, alterando su autoimagen, autoconfianza, y autoestima. Esto puede generar problemas en su convivencia social, escolar y familiar, que a largo plazo pueden generar problemas en otras esferas fuera del problema solamente de la piel si no es tratado y manejado de forma integral.

¿Cómo se diagnostica?
La observación directa de las lesiones y la historia clínica conforman el principal método diagnóstico. Su apariencia típica y los síntomas referidos por el paciente llevarán al diagnóstico de Acné.

¿Cómo se distingue de otros problemas de la piel?
Es importante que estas lesiones sean valoradas por un clínico experto, quien diferenciará de otros problemas dermatológicos que pueden asemejarse al acné, como pueden ser:

¿En qué consiste el tratamiento?
El tratamiento va dirigido a disminuir los factores que promueven el acné. Es importante mantener una piel sana, lavándose una o dos veces al día y después del ejercicio. Evite el lavado excesivo o repetitivo. La piel cabelluda también requiere de mantener una buena higiene, lave su cabello diariamente y evite en el peinado el contacto con la cara. Es muy importante mencionar que las lesiones no deben de exprimirse, rascarse ni frotarse, estas acciones pueden generar infecciones más severas y dejar cicatrices a largo plazo. Utilice una toalla específica para el secado de su cara solamente. Lave sus manos varias veces al día, evite tocar su rostro con las manos, y siempre que tenga que hacerlo, hágalo con las manos limpias. Si utiliza cosméticos, éstos deberán ser de base de agua, evite utilizar maquillajes con base grasosa. El maquillaje deberá ser retirado por las noches. Busque maquillajes no comedogénicos.

Es muy importante recalcar que se debe evitar el lavado compulsivo, ya que el intento de mantener la piel excesivamente limpia, puede resultar más perjudicial que benéfico. No todos los casos de acné vulgar mejoran solamente con la limpieza y deberán recibir un tratamiento especializado.

Solamente un Dermatólogo certificado está capacitado para indicar un tratamiento para el acné. El paciente deberá evitar utilizar remedios caseros o cremas de mostrador como automedicación. Su dermatólogo prescribirá generalmente medicamentos tópicos para disminuir la población de bacterias y mejorar la hidrolización de los triglicéridos de las glándulas sebáceas. Algunos casos serán manejados adicionalmente con antibióticos prescritos por vía oral. Los casos de acné por hiperandrogenismo deberán recibir un tratamiento corrector hormonal, indicado por el Endocrinólogo especialista.

Médicos ESPECIALISTAS encargados de diagnóstico y tratamiento
El médico general o familiar frecuentemente será quien realice la detección inicial de los casos, pudiendo derivar y solicitar la opinión de un Dermatólogo Especialista, quien se hará cargo del manejo especializado y seguimiento del paciente con Acné.

CONCLUSIÓN:
El manejo del Acné empieza desde el paciente en sus hábitos y precauciones y el apoyo familiar. Es importante recalcar que las lesiones del acné en la piel del adolescente trascienden más allá de solamente su piel, hasta su psique, el contenido de su mente, el desarrollo de su autoconfianza, autoimagen, seguridad y de una personalidad sana. El manejo del acné lleva a una adecuada salud dermatológica y por consecuencia, también mental.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

Artículo propiedad de Universo Médico
Escrito por el Dr. José de Jesús Pérez Verano
Médico Cirujano y Partero C.P. 105076